Festival Mujeres Jóvenes 2.0: Juntas construimos Bogotá
El liderazgo juvenil, eje central de su séptima versión.
El Festival Mujeres Jóvenes en 2025 reunió a 50 mujeres jóvenes en tres momentos centrales, una bici-rodada, un taller formativo y un encuentro de rap que visibilizó expresiones artísticas y emprendimientos liderados por mujeres. Fue un encuentro diseñado como un entorno seguro, creativo y político, orientado a amplificar sus voces, potenciar su participación e impulsar su contribución a una ciudad libre de estereotipos e imaginarios de género.
Este espacio de conmemoración integró a mujeres jóvenes de sectores urbanos y rurales, reconociendo la fuerza de sus experiencias, su capacidad organizativa y el rol fundamental que desempeñan en la construcción del tejido social.
Las actividades, que articularon arte, movilidad sostenible, formación y apropiación territorial, buscaron fortalecer su incidencia en distintos ámbitos de la vida pública. En palabras de la Secretaria Distrital de la Mujer, Laura Tami Leal, “las mujeres jóvenes no son el futuro, son el presente que transforma esta ciudad. Tenemos derechos que deben ser garantizados sin condiciones, y desde la Secretaría trabajamos incansablemente para que cada una viva libre de violencias, ejerza su autonomía y amplíe sus libertades en todos los espacio”.

El festival también permitió poner nuevamente en el centro las principales barreras que enfrentan las mujeres jóvenes, dificultades para acceder a la justicia frente a violencias en lo público y lo privado; discriminación en los entornos educativos; obstáculos para ingresar y permanecer en la educación superior; vulneraciones a sus derechos sexuales y reproductivos; y una oferta laboral que sigue exigiendo experiencia previa, profundizando inequidades. Estas barreras, además, se agravan por condiciones sociales que se entrecruzan y crean exclusiones acumuladas a lo largo de su curso de vida.
Ante este panorama, la Secretaría Distrital de la Mujer, a través de la Dirección de Enfoque Diferencial, ha sostenido un trabajo continuo mediante espacios respiro, escuelas psicoemocionales, ferias educativas, semilleros de empoderamiento, recorridos por la dignidad menstrual, jornadas significativas y atención psicosocial y jurídica, incluyendo acciones dirigidas a mujeres que realizan actividades sexuales pagadas. Estas iniciativas han demostrado la importancia de llegar a los lugares donde las mujeres jóvenes ya construyen comunidad, instituciones educativas, espacios de cuidado y organizaciones de base.

